En la actualidad vivimos en una sociedad que se caracteriza por hacer lo que mejor llene nuestros intereses y no nos importa lo que podamos o el daño que inflijamos a los demás, lo que lleva a llamarnos la sociedad del abuso. Uno de los tantos, lo conseguimos en la parte de la vialidad y hago esta nota a manera de reflexión para que tomemos conciencia que este tipo de conductas, que hacen que seamos abusadores, nos puede llevar a acabar con la poca cultura e identidad personal que nos queda.
Somos seres humanos y nuestro comportamiento no demuestra que pertenecemos a ese grupo. Puesto que cada día cometemos más abusos y deshonestidades que hacen que demostremos al mundo que no somos seres pensantes y racionales. El consumismo nos mata. Y para nosotros la cultura de la prevención de cualquier problema que se nos presente, no la convertimos en un compromiso social como debe ser.
Nosotros como seres humanos racionales, pensantes, como buenos ciudadanos y ciudadanas, debemos aprender a respetar y hace respetar las normas y leyes que fueron puestas para que nosotros nos guiáramos por ellas y que pudiéramos transitar libremente por la vida con toda seguridad y por todo legal. Pero, no lo hacemos. Un ejemplo de ello, es cuando estamos en el autobús o por puesto y se sube una persona mayor, o una mujer embarazada, o una persona con discapacidad, existen muy pocas personas que se levantan y les ofrece su puesto. Nosotros mismos somos los causantes de que este abuso ocurra. Ya que creemos que solo los hombres tienen derecho de ceder los puestos. Pues no, también las mujeres podemos dar el ejemplo de buenas ciudadanas.